En la Argentina vistió a varios equipos (Argentinos Juniors y Deportivo Español, entre otros) pero la más recordada fue la del Gimnasia de Márcico y los mellizos Barros Schelotto. De hecho, camiseta de argentina messi era un diseño de Adidas semejante al que usaban muchos otros clubes. Y una camiseta que hoy es un tesoro de colección: la camiseta Adidas con dos sponsors, algo ciertamente inédito por aquellos tiempos: el Canal 5 de Rosario y el Banco Provincial de Santa Fe. La camiseta, a tono con la época, era muy amplia y tenía un sponsor de la provincia: Banco Bica. Era un distinto. Y como tal, rompió los moldes durante casi treinta años de trayectoria en Primera del fútbol argentino. Y durante diez años, siempre con el mismo sponsor, la cerveza Biecket, que por aquellos años pertenecía al presidente del club, Francisco Ríos Seoane. Y en la final, en Porto Alegre, contra Gremio, Boca sorprendió con un pantalón amarillo, que nunca volvió a aparecer, pero que quedó grabado para los hinchas xeneizes. Fue en 1983, cuando le ganó la pulseada a Hitachi, para el primer sponsor de la camiseta de Boca.
Y Casla, le sumó a su camiseta Adidas, un sponsor: los caramelos Mu mu. Y un modelo de Adidas, con Siam como sponsor, que quedó para siempre en la memoria de los quemeros. Para el Mundial de Alemania 1974, Argentina tuvo un estreno: la primera camiseta con marca de su historia y el comienzo de su larga relación con Adidas, que aún continúa y que sólo tuvo dos interrupciones: la primera y más extensa en los ochenta y la segunda, entre 1999 y 2001, cuando la Afa firmó con Reebok. Con los años, el logo histórico regresó para convivir con el nuevo, pero Independiente, en 1993, tuvo una camiseta que presentaba el diseño (con tres grandes tiras) que usaron grandes equipos de la época, como el exitoso Olympique de Marsella. A comienzos de los noventa, Adidas relanzó su marca a nivel internacional, con la línea Equipment, que incluyó un logo nuevo. A comienzos de los noventa, Carlos Fernando Navarro Montoya sorprendió con un diseño ciertamente llamativo en su buzo. En 1984, Deportivo Español se consagra campeón de la Primera B de la mano de un crack, Fernando Donaires, y con un equipo que luego pelearía bien arriba en la máxima categoría.
El éxito del brillante equipo de aquel año destruyó todas las críticas y la camiseta quedó para siempre. La camiseta no tuvo grandes novedades. En julio de ese año, para enfrentar a Atlanta, Boca debía usar una camiseta alternativa y tuvo que usar una blanca con los números pintados con fibrones. Lo cierto es que Diego Maradona fue la voz de los que se resistieron inicialmente a esa camiseta, que luego se impuso. La buena: con esta camiseta debutó en Primera Diego Milito (foto). Pero para los hinchas millonarios, esta camiseta (en la foto, Francescoli, en 1994) nunca pudo ser reemplazada. En 1995, San Lorenzo volvió a ser campeón, con una figura brasileña como conductor en la cancha, Paulo Silas. Tenía un equipazo, con una figura muy joven, Gabriel Batistuta. Se ha dicho tanto sobre esta camiseta alternativa con la que Argentina le ganó a Inglaterra en México 86: los números plateados, el logo cosido de apuro, la idea de Bilardo de imitarla en Italia 90. Una camiseta que sigue vigente: Gimnasia la reeditó para enfrentar a Estudiantes en su último clásico, con Diego como entrenador. Y su camiseta Adidas celeste, con obvio sponsor, quedó para el recuerdo. Un recuerdo siempre conmovedor.
En 1988, camiseta seleccion argentina Newell’s llegó a la primera final de Copa Libertadores de su historia. Newell’s vivió, en el primer lustro de la década del 90, dos momentos históricos: en 1991, se consagró campeón en una final inolvidable en la Bombonera. Por aquellos tiempos, en 1988, Racing usaba habitualmente una camiseta Adidas con diseño tradicional, pero en aquella final de la Supercopa contra el Cruzeiro, optó por una alternativa con los mismos colores. Una camiseta maravillosa, a la que le tocó quedar injustamente ligada al peor momento de la historia de Racing. A la crisis futbolística por un equipo que naufragaba en los últimos lugares de la tabla, se sumaba una crisis económica asfixiante. En 1987, Rosario Central se consagra campeón con un equipo que venía de ascender desde la B y que tenía muchas figuras: Palma, Gasparini, Escudero, Bauza… Este fin de semana iniciará una nueva Superliga Argentina de Fútbol en la que los clubes buscarán quedarse con el título de Primera División. Este puesto no es para una camiseta, sino para un pantalón. Y con una marca brasileña, Penalty, que no sólo vistió a muchos equipos argentinos en los últimos 25 años, sino que además, puso la pelota del fútbol argentino a comienzos de la primera década del siglo.
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